Si tu negocio colabora remotamente, es crucial que te informes.
¿Alguna vez te han dicho que todo lo que haces deja huella en el mundo? Puede que sea cierto, o puede que no. Ese es un problema para los filósofos. Pero, lo que sí podemos afirmar es que cada vez que navegas en internet, dejas rastro de lo que hiciste.
Así es, todos y cada uno de nuestros dispositivos con conexión se pueden rastrear. Por eso, proteger tu dirección IP y restringir las IPs que tienen acceso a tu red, es esencial para la seguridad de tu información.
Proteger tu red y los servicios internos es una de las estrategias de seguridad más importantes para el éxito de tu empresa. Aquí te contamos cómo lograrlo.
¿Qué es una dirección IP?
Las siglas IP se refieren a internet protocol. Las direcciones IP son las encargadas de identificar todos los dispositivos y redes conectadas a internet. Esta es única para tu equipo o servidor y es localizable mientras está encendido.
En pocas palabras, tu IP, es lo que te hace único en el ciberespacio. En sí, su propósito principal es hacer que un dispositivo se comunique con otros. Es decir, ellas son el puente entre tú y el sitio web que quieres visitar.
Es importante que tu IP no esté al alcance de todos, porque de serlo, te expones a que los ciberpiratas sepan cómo encontrarte. Además de que pueden robar tu información y descargar o hacer cosas ilegales con tu dirección.
Si ocultas tu IP o bloqueas el acceso a que alguien lo vea, ya estás más seguro.
¿Cómo proteger tu dirección IP?
Es importante que mantengas las conexiones y activos digitales restringidos para asegurar tu red. Para poder proteger tu dirección IP, primero hay que saber cómo funciona y quién la asigna a tu dispositivo.
Comencemos por entender que la IP es un conjunto de cuatro bloques de números que es asignado por tu ISP (Internet Service Provider), o sea tu proveedor de internet. Esta dirección se asigna en cuanto te conectas a la red.
Existen dos tipos de direcciones IP, públicas y privadas. La IP pública es la dirección general que se le aplica a toda tu red. Por ejemplo, la red WiFi de tu casa tiene un módem con una dirección IP única.
Ahora, todos los dispositivos que se conecten a ese módem tendrán una dirección IP privada. Con esa IP privada se pueden distinguir los diferentes aparatos conectados a tu red local.
En resumen, el proceso se ve así:
- El modem te da tu IP pública que se expone a internet.
- Todos tus dispositivos de casa (red LAN) tienen IP privada.
- Todos los dispositivos salen a internet por la IP del módem.
Para proteger tu dirección IP y por lo tanto, toda la información que procesas en internet, te sugerimos aplicar una VPN.
Protégete con una VPN
Con VPN nos referimos a Virtual Private Network, o red privada virtual en español. Tal cual como lo dice su nombre, las VPNs te permiten crear una red privada de manera virtual.
Piénsalo como las direcciones de IP privadas que mencionamos anteriormente. Con una VPN diferentes dispositivos pueden conectarse a la misma red y por lo tanto, su dirección IP indicará que vienen del mismo sitio geográfico.
Básicamente, una VPN es un servidor que por medio de un canal cifrado enmascara tu IP. Para entenderlo de una mejor manera veamos el siguiente ejemplo.
Cuando te conectas desde tu celular se ve de la siguiente manera:
Celular —-> Modem de casa —–> Internet
Con una VPN se ve así:
Celular —-> Modem de casa —-> Cifrado VPN IP (como si fuera un 2do modem) —> Internet
Crear una VPN es una muy buena idea si quieres proteger la información de la red de tu empresa. Una de sus ventajas es que puedes decir qué IPs pueden acceder y cuáles no. Prácticamente, funcionan como un filtro para mantener usuarios no deseados lejos de tu información.
Más beneficios de la VPN para tu negocio
Otros de los beneficios de implementar una VPN en tu red empresarial son:
- Oculta tu dirección IP y datos de tu ubicación específicos.
- Accede a los servidores de tu empresa de manera segura y sin tener que estar físicamente presente.
- Conexión cifrada. Con una VPN tu información viaja cifrada y ante un ataque tipo man in the middle, estás protegido.
Hackmetrix insight: Man in the middle es un ataque para interceptar información sensible entre dos dispositivos que se comunican a través de la misma red.
Contar con una VPN es esencial para la seguridad de tu empresa, sobre todo si algunos de tus colaboradores trabajan de manera remota. Ya que al conectarse a través de una VPN la conexión es mucho más segura. Además de que puede utilizarse para filtrar accesos e identificar si el trabajo de tus colaboradores se ejecuta desde un servidor de la compañía.
Una buena herramienta para implementar si trabajas remotamente es Videsk. Para conocer más sobre las funciones de restricción de IP que ofrece Videsk te sugerimos leer este artículo.
Sobre todo, si están usando una red WiFi pública, como la de un café, un aeropuerto o un hotel. Esto porque los cibercriminales pueden acceder fácilmente a estas redes y robar la información del usuario. Lo que por default, pone en peligro a los servidores de tu empresa, y más si logran conseguir la dirección IP de esos servidores.
Otras acciones que puedes tomar, además de implementar una VPN para proteger tu IP, son
- Usar el Browser TOR
- Navegar en ventana de incógnito
- No aceptar cookies para estar “anónimo”
Proteger tu dirección IP nunca está de más
Proteger tu dirección IP es sumamente importante para proteger tu identidad y actividad cibernética. Tanto para ti personalmente, como para tu empresa.
La dirección IP es lo que te hace único entre los miles de millones de internautas en todo el mundo. Con ella es posible detectar que haces, y desde dónde lo haces. Algo creepy, ¿no? Pero, bueno.
Aunque es algo que puede poner en riesgo tu seguridad existe una solución para ello. Con una VPN no solo puedes ocultar tu dirección IP, sino que también ayuda a que las conexiones a tu servidores sean más seguras.
Si tienes alguna duda sobre el tema o te gustaría saber más de ciberseguridad para tu negocio, no dudes en contactarnos.
